FECHA: 25-07-1971 - POSICIÓN: 20 -
CATEGORÍA: Formula 2 europea (sin Puntos)
Un estreno por demás discreto hizo el equipo argentino de Fórmula 2 con nuevos Brabham BT 36. Si bien los vehículos rindieron satisfactoriamente, los motores sufrieron problemas que relegaron tanto a Reutemann. como a Ruesch en la clasificación final. De todos modos, ambos pilotos quedaron plenamente conformes con las máquinas.El esperado debut se realizó en el Gran Premio de Imola disputado el 25 de Julio en el renovado autódromo local. ahóra denomiado Enzo y Dino Ferrari, en memoria de de Enzo Ferrari y de su hijo. Ya en las pruebas de clasificación se notó que los nuevos autos satisfacían las necesidades de los argentinos , Carlos Reutemann, con un quinto puesto a medio segundo del primero, estuvo dentro de lo que ya es tradicional en el. Carlos Ruesch, en cambio, dio el primer paso de lo que luego sería su mejor labor europea hasta el momento: quedó duodécimo, a dos segundos y medio del mejor tiempo. Este correspondió al italiano Claudio Francisci, con 1'35"72/100, en tanto Reutemann señaló 1'36128/100 y Ruesch 1’38"021/100. A pesar de ello, el compromiso aparecía dificil; no obstante no entregar puntos para el campeonato europeo de la especialidad, las principales figuras de la categoría estaban presentes, destacándose los hermanos Fittipaldi, Francois Cevert, Dieter Quester, Helmut Marko, Carlos Pace y un nutrido grupo de italianos con máquinas nuevas en su mayoría. La primera serie dio la pauta de lo que sería la carrera de no mediar imprevistos: Francois Cevert dominó ampliamente de punta a punta, adueñándose del éxito final en forma inobjetable, escoltado por Wilson Fittipaldi, Quester, que como siempre introdujo su BMW como una cuña entre los punteros, y el brasileño Carlos Pace. Para los argentinos, la serie fue decisiva respecto a la suerte futura: Reutemann debió abandonar a las tres vueltas, cuando una biela dejó su lugar para hacer un agujero en el block, en momentos en que marchaba sexto. Ruesch, por su parte, no tuvo mejor suerte: a los diez giros y cuando se encontraba décimo, se rompió la correa de la bomba inyectora de su motor. lo que también lo obligó a desertar. En general, la prueba se caracterizó por la gran cantidad de abandonos y problemas que debieron afrontar los participantes, los que dejaron pocos autos para el final. Así, de los 21 que largaron la batería inicial, sólo 12 la terminaron. En la segunda parte, el panorama no cambió mayormente. aunque para los argentinos la competencia tuvo un sabor distinto. Si bien Reutemann no largó, la unidad de Ruesch pudo ser reparada. Al comenzar la serie, el cordobés circuló en medio del pelotón, pero poco a poco fue escalando posiciones hasta encaramarse en los primeros lugares de la clasificación en una labor realmente inesperada. Sin duda, Ruesch ratificaba en los hechos sus palabras de confianza para con el nuevo BT 36, auto al que desde un principio encontró más acorde con su estilo: algo que nunca sucedió con el viejo BT 30. Sobre el final de la batería, el argentino se trabó el lucha con el monegasco Leonel Noghes y el veterano Xavier Perrot, pero los doblegó relegándolos y adueñándose de un valioso tercer Jugar que le propiciarla el octavo en la clasificación general por suma de tiempos. El equipo argentino en pleno quedó gratamente sorprendido por el accionar del cordobés, quien evolucionó a la altura de las necesidades que planteó la carrera, no decayendo en su ritmo en ningún momento. Probablemente, de no mediar el inconveniente que lo retrasó en los comienzos de la carrera, a estas horas Ruesch estaría festejando un cuarto puesto que sin duda hubiera resultado beneficioso para su estado de ánimo, alicaído luego de tantos fracasos seguidos. Esta actuación reconforta al equipo en pleno y demuestra que el segundo piloto del ACA puede resultar un elemento valioso dentro del funcionamiento de la escudería tan pronto como se generen, en torno de él, las condiciones necesarias. Resulto llamativa la "debacle" de los dos motores utilizados en esta carrera, teniendo en cuenta que eran dos plantas renovadas hace poco días en los talleres de, Peter Westbury. De todos modos, la escuadra del ACA posee dos unidades cero kilómetro entregadas recientemente por Cosworth, las que serán utilizadas en el próximo compromiso puntable. Para tal efecto, fueron ablandadas en algunas vueltas de prueba al circuito británico de Goodwood, antes de salir para Italia. La carrera fue ganada por el brasileño Carlos Pace, quien rearmó así todo lo bueno que hizo en la categoría en el poco tiempo que corre en ella. Su ascenso en el firmamento de la F 2 fue realmente meteórico. Desde la primera competencia que corrió estuvo entre los primeros con su rojo March 712 M. alcanzando la victoria en su cuarta presentación. Los numerosos abandonos llevaron al segundo lugar al italiano Giovanni Salvatti: quedó tercero Xavier Perrot y cuarto otro brasileño, Emerson Fittipaldi, quien sufrió diversos problemas en ambas series. Los dos volantes argentinos coincidieron, luego de la prueba. en sus apreciaciones respecto a los nuevos autos. Tanto Reutemann como Ruesch manifestaron encontrarse mucho más cómodos en ellos, señalando que doblan notablemente mejor y poseen condiciones como para agilizar la salida de las curvas. Ahora, todo hace suponer que una vez adaptados los hombres a su nueva herramienta, identificados plenamente con las posibilidades que estas ofrecen. las actuaciones podrán mejorarse. Brabham tardó tal vez más de la cuenta en entregar los autos, pero, según los pilotos, valía la pena esperar..
Imola
El Autodromo Enzo e Dino Ferrari es un autódromo de 4,9 km situado en Imola, región de Emilia-Romaña, Italia. Es uno de los principales de su país, habiendo albergado carreras de numerosos campeonatos mundiales y europeos de automovilismo de velocidad y motociclismo de velocidad además de italianos.